Sigue haciendo historia.

¿Quién puede frenar a este huracán llamado Nadal? Hasta el momento, en lo que a polvo de ladrillo respecta, nadie lo sabe. Cada año gana con mayor superioridad. Pero éste ha sido humillante. Con Nadal
sobre la Philippe Chatrier en la final de la Copa de los Mosqueteros, no se cumple nada. En esta ocasión, por ejemplo, no ha sido cierto el dicho ''a la tercera va la vencida''. La tercera oportunidad de Federer tirada por la borda. Una hora y cincuenta minutos es el tiempo que ha necesitado el balear para igualar a Bjorn Börg, derrotando al número uno mundial por 6-1, 6-3 y
6-0.

No hubo color en la final. No hubo tampoco lugar a las sorpresas. Tres 'breaks' y al banquillo. Poco más de media hora había empleado el manacorí para cerrar la primera manga. Federer no había encontrado la forma. Tampoco comenzaban bien las cosas para el suizo en la segunda manga, aunque empujado por el público su juego ofrecería un atisbo de mejoría. Recuperaría el 'break' y pondría a Nadal contra las cuerdas durante varios juegos del segundo set. Pero la solidez del balear cansó al helvético, que bajó los brazos y entregó el segundo set al de Manacor por 6-3. Este manga había estado más disputada, pero su desenlace sería la gota que colmaría el vaso para Federer.

Lo había intentado por todos los medios, pero era inevitable. Él lo sabía, y Nadal también. Era cuestión de tiempo que el español cerrase el partido. Nadal decidió ser breve y, endosándole un 'rosco' al suizo, finiquitaría su victoria. Esa forma de ganar no le había gustado al balear, que hubiese preferido un poco más de batalla. Pero cada uno tiene su territorio, y Roland Garros es el Nadal. Federer ya tiene Wimbledon o el US Open para resarcirse.

Por otro lado, Ana Ivanovic se impuso en la categoría de individuales femeninos derrotando en la final a Dinara Safina. Virginia Ruano y Anabel Medina se coronaron en dobles femeninos derrotando a Schiavone y a Dellacqua, y Luis Horna y Pablo Cuevas hicieron lo propio en dobles masculinos ante Nenad Zimonjic y Daniel Nestor.