miércoles, 3 de septiembre de 2008

Robinho acaba en Inglaterra, pero no en Londres, sino en Manchester.

Y no jugará en el United, sino en el multimillonario City, que está llamado a suceder al Chelsea de Abramovich como próximo equipo que reventará el mercado de fichajes. Por el momento, ya le ha ganado una batalla, la de fichar a Robinho. Tras una noche muy ajetreada, el Real Madrid traspasó al Manchester City a Robinho por 40 millones a pagar en efectivo y dos por objetivos (en este caso que el City alcance la Liga de Campeones).


La noticia fue anunciada por Ramón Calderón en Veo TV. El futbolista brasileño logró con sus desmedidas ruedas de prensa marcharse del club merengue, aunque tampoco consiguió que su destino fuese Londres, pues el club de Manchester, propiedad de la familia real de Abu Dabi, fue más ambicioso y rápido que la entidad londinense. La indecisión de Peter Kenyon animó a Sulaiman Al-Fahim, propietario del City, a no escatimar en gastos y cerrar una operación favorable para los intereses económicos del Real Madrid.

El multimillonario Al-Fahim pretende elevar al Manchester City a la cúspide del fútbol mundial y relevar al Chelsea de Abramovich como el equipo más rico del mundo. Hay que recordar que el club londinense pasó en apenas tres años de ser un equipo del montón a pelear con los grandes de Europa. Sin ir más lejos, los 'blues' ganaron su primera Premier hace más de cincuenta años y encadenaron dos en 2004/2005 y 2006/2007. Pues el magnate árabe pretende hacer lo mismo con el Manchester City, un club que hasta hace escasos años se nutría de descartes de los clubes grandes, casos de Steve McManaman o Kizito Musampa, y que desde el año pasado está creando una gran plantilla a golpe de talonario. A los Corluka, Garrido, Elano, Hamann, Castillo, Ireland, Petrov, Benjani, Vassell o Bojinov se han unido este año Schmeichel, Ben Haim, Zabaleta, Gláuber, Kompany, Jô, Wright-Phillips o el propio Robinho. Durante el verano el City estuvo a punto de contratar a Ronaldinho, y, según se hizo saber, envió un cheque en blanco al Real Madrid por Van Nistelrooy. Además, según ha declarado el propio Al-Fahim, su próximo objetivo sería Cristiano Ronaldo, por el que estaría dispuesto a pagar hasta 170 millones de €uros.

Así finaliza el culebrón de Robinho, pero el club merengue no fichó a nadie al cierre del mercado y Schuster tendrá que conformarse con Van der Vaart como único refuerzo, en espera del mercado invernal, en el cual el Real Madrid intentará realizar alguna incorporación, preferentemente un punta. Si no, el alemán tendrá que esperar hasta el próximo verano, gran objetivo de Ramón Calderón, pues planea abordar los fichajes de Kaká, Cristiano Ronaldo y Cesc, con motivo de las elecciones a la presidencia blanca y la final de la Liga de Campeones 2009/2010, que se disputará en el feudo madridista.

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